sábado, 7 de noviembre de 2009


UN DIA MENOS

Otro día se acaba en esta agenda.
otro mar de ilusiones que se estanca,
otra hoja arrancada al calendario
de no tenerte cerca, de perderte.
.
Otro día, otra noche, otro suspiro
cuando te me evaporas en un beso,
cuando te vas con todos mis poemas,
cuando apagas el día con tus ojos.
.
Y tu melena arrastra las estrellas
que oscurecen el mundo en tu partida,
y son tus piernas viva enredadera
que se aferra a los troncos del deseo.
.
Es noche ya… te vas, y llega el sueño,
-qué ironía, te vas,… y al tiempo llegas-,
me sonríes al alma, y es tu nombre
la última plegaria de mis labios…
.
Serás de nuevo un verso, el más hermoso,
bailaré con tu sombra en el abismo
y a tus plantas vendré, tan entregado
que caerán tus murallas con mi aliento.
.
Pero no… no decaiga el dulce empeño
de un sueño de querube enardecido,
que quizá un día quiso ser diablo
por probar el calor que de ti emana;
.
que no decaiga, pero que no cese
el ímpetu, las ganas de adorarte,
pues hoy tu esencia es carne de mi hambre,
tu olor mi olor, tu incógnita mis huesos.

¡Que no se pierda, amor, mi osado ruego
en las manos traviesas del olvido!.

1 comentario:

Erika dijo...

No se pierde lo que el corazón hace renacer cada día. Precioso poema.

Besitos