domingo, 22 de abril de 2012


NO ES COSA DE RISA

Abrió la puerta ausente, con los ojos hinchados
y señales de angustia en cada movimiento;
con voz nerviosa dijo "¿me permite un momento?"
le dije:"si", y al punto, ya estabamos sentados.
Me contó de su miedo, tanto tiempo ocultado,
de piedras en el alma que no se lleva el viento,
de acabar con un tiro todo su sufrimiento,
de muerte y amor negro que espera al Otro Lado...

Viendo que mi experiencia y mi voz no bastaba
le conté de un payaso que en risas, su desdicha
cambiaría, en un circo que estaba a sólo un paso;
"¡Vaya a ver al gran Enzio!" Le dije. No esperaba
que al pedirle su nombre para cubrir la ficha
me dijese "doctor... ¡si yo soy ENZIO, el payaso!"
Segis.